Perros sacrificados por matar a dos mujeres

La semana pasada conocíamos el fallecimiento de dos mujeres, madre e hija, a mano de dos de sus seis perros en la localidad madrileña de Colmenar de Oreja. Hoy nos enteramos que el Centro Integral de Acogida de Animales de la Comunidad de Madrid (CIAAM) ha sacrificado a los perros agresores después de valorar sus escasas posibilidades de recuperación.

Según cuentan allegados de las víctimas, la hija se acercó al domicilio de la madre a recogerla para llevarla al trabajo y se percató de que la habían atacado los perros, agrediéndola a ella también.

Cuando llegó el marido de una de ellas a casa se encontró a las dos mujeres ya fallecidas como consecuencia de las numerosas mordeduras que le propinaron los canes.

En el hogar vivían seis perros, cuatro American Staffodshire Terrier, que no participaron en la agresión, y los dos dogos de Burdeos responsables del ataque.

Los seis perros fueron sedados y puestos en cuarentena por las autoridades competentes y tras analizar las mordeduras corroboraron que solo los dos dogos habían mordido a las mujeres.

Sin documentar y sin vacunar

Después de practicarles varios análisis y valorar sus posibilidades de recuperación, se tomó la decisión de sacrificar a los dos canes agresores.

Según recogen en El País:

El sacrificio se produce después del informe realizado por los veterinarios del centro, que ha determinado la elevada agresividad de los perros, la dificultad de su manejo, la falta de documentación y la carencia de vacunas contra la rabia, lo que podría poner en peligro la seguridad de los empleados y del resto de los animales allí albergados.

Curiosamente la raza dogo de Burdeos no figura en la lista de PPP (Perros Potencialmente Peligrosos) del real decreto de 2002, aunque sí aparece en las de algunas Comunidades autónomas; sin embargo los cuatro American Staffodshire Terrier que se mantuvieron al margen de la agresión, sí están catalogados como perros de raza peligrosa.

Debido a la gravedad de los hechos la investigación sigue abierta y puede que el marido de una de las víctimas y dueño del chalé acabe imputado por varios delitos en relación con la situación de los perros, ya que ha quedado patente que, además de no cumplir la normativa en cuanto a documentación y vacunas, los perros no estaban debidamente atendidos.

Vía: El País
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